Ejercicio físico contra las dieta milagro
Los expertos en nutrición alertan. Aunque habría que decir que alertan una vez más. Las llamadas dietas milagro no son en absoluto buenas para la salud de las personas. Todo lo contrario.
Y, desgraciadamente, continúan estando al cabo de la calle a pesar de sus riesgos.
En el mundo de la dietética y nutrición continúan habiendo falsos profesionales que las recomiendan.
También hay que contar con el mal hábito que muchos españoles tienen de automedicarse con los riesgos que conllevan.
Tampoco las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea están ayudando en erradicar las dietas milagro. Muchas de ellas se comparten por estas nuevas tecnologías y, lo que es peor, mucha gente las aplica sin contrastar si pueden ser buenas o malas.
¿Qué son las dietas milagro?
Pero, ¿qué son las dietas milagro? ¿Cómo las podemos definir? Vamos a empezar por responder a estas preguntas.
Lo primero que podemos decir de las dietas milagro es que “se aprovechan” de las ansias que algunas personas tienen de adelgazar de una manera rápida. Los que las recomiendan prometen resultados rápidos.
Para conseguir estos resultados rápidos lo que se prohíbe (y esto supone un auténtico peligro para la salud) es uno o varios grupos de alimentos. Para estar saludable hay que comer toda clase de alimentos.
Los pseudoprofesionales de la dietética también hacen listas de alimentos que son malos y buenos. No hay alimentos malos. La clave de la buena salud es saber combinarlos adecuadamente.
Otra de las características de las dieta milagro es que recomiendan que se tomen productos dietéticos. No hace falta decir que estos no son productos naturales y que pueden tener contraindicaciones.
También “se encumbra” a un determinado alimento. Los califican como “súper alimentos” con unas propiedades que no tienen.
Determinadas “celebreties” se prestan a promocionar las dietas milagro. Flaco favor el que están haciendo a una buena parte de la población.
Y, desde luego, los que están recomendando estas dietas milagro lo hacen a sabiendas de que están contradiciendo a todo el colectivo sanitario, a todos los profesionales de prestigio del sector de la nutrición y a organismos tan importantes como la Organización Mundial de la Salud.
Los que se hacen pasar por especialistas y recomiendan estas dietas milagro son poco menos que unos estafadores.
¿Cuál es la solución a las dietas milagro?
La solución a las dietas milagro es, por supuesto, no hacerlas. Y si una persona está decidida a adelgazar lo que tiene que hace es acudir a un dietista-nutricionista reconocido.
No todo el mundo adelgaza de igual manera. Cada persona tiene sus características peculiares. Para poder adelgazar hay que hacer un estudio de cada físico, incluyendo análisis de sangre que nos indiquen si el paciente puede sufrir algún trastorno que pueda impedirle ingerir un determinado alimento. Si esto ocurre, el especialista le recomendará otros que aporten esos nutrientes necesarios.
Lo lógico es que el especialista recomiende una dieta basada en la mediterránea que es el modelo alimenticio más saludable del mundo. En esta dieta se combinan todos los alimentos de la pirámide de alimentación. No se prohíbe ninguno como suele suceder en las dietas milagro.
Esta pirámide lo forman siete grupos de alimentos. Y se han de combinar adecuadamente. Se ha de comer de todo, con menos cantidad, pero de todo para tener una buena salud individual.
No se engorda si se toman ciertos alimentos. Se engorda si se consumen más calorías de las que se queman. Ahí está la clave de perder peso. Quemar más calorías de las que se comen. Y, por supuesto sin darle más prioridad a unos alimentos que otros.
El ejercicio, otra clave
¿Y qué se puede hacer para quemar más calorías de las que se ingieren? Efectivamente. Hacer ejercicio. Si se puede hacer diariamente, mejor que mejor.
Pero si no has hecho ejercicio nunca o hace mucho tiempo que no lo haces lo mejor es que primero vayas a un médico y te haga un chequeo. Estarás mucho más tranquilo y seguro que también te dirá hasta dónde puedes llegar en tu actividad física.
Si estás dispuesto a hacerlo elige una actividad que te resulte divertida. Si te aburres lo vas a dejar muy pronto y será una auténtica pena. Si tienes amigos con los que salir a correr o pasear, mejor que mejor.
Lucha contra el sedentarismo. Si no tienes tiempo ve a trabajar a pie, o sube escaleras. Sólo hay que hacer un pequeño esfuerzo mental para cambiar de hábitos y tu salud te lo va a agradecer.
¿Qué opinas de las dietas milagro? ¿Has hecho alguna? ¿Qué tal te ha ido? Nos encantaría que compartieras este post por tus redes sociales y que nos hicieras llegar tus opiniones.